Si bien, cualquier persona del mundo puede ser infértil, cada vez más las mujeres chilenas sufren la enfermedad producto de la postergación de la maternidad.
Por lo mismo, “en Latinoamérica, la tasa de natalidad es de al menos 2,5 o 3. Esto quiere decir que cada pareja tiene de 2 a 2 y medio hijos, mientras que en Chile no, la tasa de fertilidad en el país es muy baja, de hecho, se comporta similar a las tasas europeas”, señala la ginecóloga de Clínica Dávila, Karina Sequeira.
La mujer nace con una cantidad finita de ovocitos para concebir hijos. Por esto, con el paso de los años, se van agotando las reservas, lo que produce que cada vez sea menor la posibilidad de quedar embarazada.
La especialista desde su experiencia, ha notado que gran cantidad de mujeres chilenas busca la maternidad después de los 35 años, periodo en el que ya comienza a ser complejo lograr un primer embarazo.
“A lo mejor ni siquiera es que sean infértiles como tal, pero si estás teniendo un hijo a los 40, la tasa de éxito ya es baja, es como un 5%-10% en lugar de un 20%”, además del aumento en la posibilidad de aborto, explica.
A pesar de las bajas probabilidades de un embarazo a una edad cercana a los 40 años, hoy en día gracias a los avances tecnológicos se pueden buscar otras alternativas que permiten tener hijos con ayuda de una intervención médica.
La ovodonación
La ovodonación consiste en un tratamiento que permite embarazarte con los ovocitos de una mujer más joven, quien acepta donarlos y someterse a los tratamientos necesarios.
Para realizar el procedimiento se sigue una serie de pasos:
- Entrevista personal:
Para que una mujer pueda ser donante, se busca que no tenga enfermedades de transmisión sexual, no tenga probabilidades genéticas de desarrollar enfermedades extrañas y, finalmente, que no sea una persona que consume drogas.
También, se ve si la mujer se parece a la futura madre, ya que generalmente estas buscan que sus hijos tengan un parecido con ellas.
- Exámenes médicos:
Los exámenes se realizan con el fin de detectar posibles enfermedades que la donante no sepa que tiene. Esto ya que se intenta buscar que esta sea lo más sana posible.
Además, algunos de estos exámenes permiten detectar si faltó información en la entrevista.
- Estimulación ovárica:
Luego de la selección de la candidata se comienza a realizar lo que se conoce como estimulación ovárica, donde a través de hormonas, se busca que ésta libere más ovocitos de lo normal.
El tratamiento tiene una duración de aproximadamente 11 días, entre los cuales deberá estar diariamente recibiendo la carga hormonal y en algunos periodos de esos días, realizarse ecografías para poder ver si está siendo efectivo el tratamiento.
- Aspiración folicular:
Consiste en el proceso de extracción de los ovocitos. Este es en una cirugía simple, que se realiza en pabellón. También, se anestesia a las donadoras, provocando el adormecimiento de la cintura hacia abajo.
Con la ayuda de una ecografía transvaginal, se guía una aguja hacia los ovarios de la mujer. Con esta se extraerá aproximadamente entre 15 y 20 ovocitos.
El procedimiento tiene una duración que rodea los 20 – 30 minutos. Luego de este un biólogo es encargado de revisar si los ovocitos están maduros, limpiarlos e implantar el espermatozoide de un donador o de la pareja de la mujer que busca el embarazo.
Luego, antes de ser puestos dentro de la madre, se esperan unos cinco días, en los que ya se está produciendo el crecimiento de un embrión. Finalmente se esperan 14 días para ver si el tratamiento fue un éxito.
Con los cambios socio-culturales que se viven a diario, la ovodonación es una gran alternativa para todas aquellas mujeres que, por temas de trabajo o calidad de vida, decidieron en su momento postergar la maternidad.