Conocida como la prueba de sueño, permite identificar diversos trastornos que dificultan el descanso de una persona. Este examen se realiza en la Clínica y dura alrededor de 10 horas.
El descanso es fundamental para que el cuerpo y la mente puedan recuperar energías y prepararse para afrontar el próximo día. Sin embargo, cuando este se encuentra alterado puede desencadenar síntomas como son fatiga, dolores de cabeza, estrés e incluso padecimientos más graves como hipertensión arterial, debilitamiento del sistema inmune, entre otras enfermedades. Por eso, es importante detectar a tiempo si se padece de un trastorno del sueño.
La polisomnografía, es un examen que permite profundizar en estos trastornos como lo son las apneas del sueño (pausas de la respiración mientras se duerme), narcolepsia (sueño excesivo durante el día), insomnio, hipersomnia diurna, movimientos periódicos nocturnos, piernas inquietas, trastorno conductual del sueño REM, etc.
A diferencia de la poligrafía que se realiza en casa con un equipo portátil y que no sirve para los trastornos de sueño, la polisomnografía es un estudio completo, que se lleva a cabo en un ambiente controlado hospitalizado, donde se solicita al paciente que duerma una noche en la clínica para así monitorear durante toda la noche las posibles causas que afectan su reposo mientras está dormido. Este examen no es invasivo, por lo que no significa ninguna molestia o dolor para quien se lo realiza y puede retomar sus actividades sin problemas una vez finalizado el procedimiento.
Tipos de polisomnografía:
- Polisomnografía basal: Conocida como la prueba estándar para diagnosticar trastornos del sueño, consiste en un completo examen nocturno que registra la frecuencia cardiaca, nivel de oxígeno en la sangre, contracciones musculares, movimiento de los ojos, piernas, electroencefalograma, ronquido, entre otras alteraciones.
- Polisomnografía con Titulación de CPAP: La diferencia con el estudio anterior, es que en este se instala una máscara de presión positiva continua en la vía aérea del paciente, conocida como CPAP, por sus siglas en inglés Continuous Positive Airway Pressure, con la que se aplica aire a presión de forma gradual. De esta forma, se reduce la obstrucción de la vía aérea, con lo que el paciente logra disminuir las pausas respiratorias y el ronquido.
- Polisomnografía con Titulación de BiPAP: En este estudio se utiliza un dispositivo que funciona con ventilación bifásica de presión positiva (BiPAP) el cual genera dos presiones de aire diferentes: una para inhalar y otra para exhalar, lo que permite que sea más tolerado en pacientes que requieren presiones de tratamiento mayores.
- Polisomnografía en noche dividida: Para este estudio, se lleva a cabo un registro basal durante las primeras dos horas del examen. En caso de que el paciente cumpla con una serie de diagnósticos relacionados con pausas respiratorias, se le aplica una máscara de presión positiva continua (CPAP).
El Servicio de Neurología y Neurocirugía de Clínica Dávila cuenta con un moderno y completo Laboratorio de Neurofisiología, en forma ambulatoria y hospitalaria, con un área exclusiva para realizar el examen. Su duración es de aproximadamente diez horas, por lo que requiere que el paciente duerma una noche en la clínica. La persona debe tomar los medicamentos que consume de manera habitual (a no ser que el médico tratante le indique lo contrario), siguiendo las indicaciones que se le entregan una vez que realiza la reserva de la hora.
Si tienes un trastorno del sueño en estudio, trastorno respiratorio durante el sueño (apnea-hipoapnea) y debes realizarte una polisomnografía o una poligrafía puedes agendar tu hora al 2 2730 8863 o escribir al correo laboratorio.neurologia@davila.cl
Fecha de publicación: 14/01/2021
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